Podemos encontrar los antecedentes relacionados con esta epístola en Hechos 16, que cuenta la visita de Pablo a Filipos. Dios ha comisionado a Pablo para propagar el evangelio, pero ha prevenido al apóstol y sus compañeros de seguir su plan original, y en su lugar dirigirse a Filipos.
Lo que se describe aquí en cuatro líneas era verdaderamente un viaje muy largo. Galacia, Frigia y Asia (Menor) eran tres regiones que se encontraban una a continuación de la otra. Pablo y aquellos que lo acompañaban, pasaron las primeras dos (Frigia y Galacia) y llegaron a la tercera: Asia Menor. Sin embargo, como el texto dice, Dios les prohibió que predicaran allí la Palabra, así que se fueron al norte, rumbo a Misia. No obstante, cuando trataron de irse de allí a Bitinia, Dios se los prohibió de nuevo. Como resultado, pasaron por Misia y fueron a Troas, en el mar Egeo.